Válvulas de compuerta

Las válvulas de compuerta son aquellas válvulas cuya apertura funciona gracias a levantar una cuchilla redonda o rectangular. Así permiten el paso y regulación del fluido a través de ellas.

Son muy usuales en cualquier tipo de instalación, tanto interior como exterior o subterránea y tienen un funcionamiento bastante sencillo. Este solo permite estar completamente abierto o completamente cerrado, dejando pasar el fluido o restringiéndolo, respectivamente.

Normalmente la compuerta está cerrada y se abre mediante unos giros en sentido antihorario (CTO). Para volver a bajar la cuchilla solo hay que girar de nuevo el vástago, pero esta vez en sentido horario (CTO).

Válvulas de compuerta de uso industrial

La válvula de compuerta es ideal para aquellas instalaciones donde la pérdida de carga es mínima y se precisa un paso total. Asimismo, las válvulas de compuerta tienen mucha más capacidad que otras opciones y ofrecen un cierre total del flujo.

Por lo general, estas válvulas suponen un coste bajo para el usuario y su funcionamiento es muy sencillo y eficaz. Sin embargo, pueden producir cavitación y en ocasiones necesitan operarse con mucha fuerza. Existen válvulas de compuerta fabricadas en multitud de materiales, aunque los más comunes son el bronce, el acero inoxidable, el hierro, el latón, el acero forjado o el acero al carbono, dependiendo del uso final que el cliente vaya a darle.

En Mendata recomendamos que se lubrique el husillo de forma periódica, para asegurar su correcto funcionamiento y aumentar de forma considerable su período de validez.

Válvulas de compuerta
Válvulas de compuerta
Válvulas de compuerta
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Válvulas de compuerta
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Válvulas de compuerta